El pasado mes de noviembre, el entrenador del club ruso Ural Yekaterinburg, Vadim Skripchenko, dimitía como técnico bajo las sospechas de amaño tras haber perdido su equipo contra elTerek Grozny.

Los medios de comunicación rusos informaron que el partido seguía unos patrones inusuales de apuestas, lo que llevó a pensar a los corredores de apuestas que el partido podría estar amañado. Por su parte, el presidente de la Federación Rusa de Fútbol anunció que se abrió una investigación al respecto pero que no había arrojado indicios de amaño.

Pero por otro lado, un abogado que representa los intereses de los apostadores rusos, declaró que se llevarían a cabo acciones legales por parte de sus clientes, ya que creían firmemente que el partido estaba claramente amañado.

Fuente: Business Recorder

Javier Pérez Villa